Después de hablarle cambiando los pañales, podemos jugar con
el bebé y ejercitar sus extremidades.
¿Cómo se juega?
-El bebé está sobre el cambiador, después de hablarle
cambiando los pañales, o en la manta de juegos, con los pies descalzos y con
ganas de jugar.
-Primero le acariciamos con nuestros dedos la planta de sus
pies, cerca del talón.
-El niño responde riendo y extendiendo los dedos de los pies.
-Después hacemos lo mismo cerca de los dedos de los pies y
observamos cómo lo contrae.
-Podemos ir alternando estas acciones varias veces.
-Finalmente, tomamos los dedos de su pie, empezando por el
meñique y terminando por el pulgar, y se los movemos mientras cantamos.
-Al llegar a la frase final, hacemos ver que nos comemos su
dedo gordo, lo que le causará gran regocijo.
¿Qué se logra?
-Entrenar la motricidad fina de los pies del bebé.
-Ayudarle en la exploración sensorial de su cuerpo.
-Fomentar la adquisición progresiva de la capacidad de
atención.
-Enseñarle a manifestar emociones.
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